Los periodistas del sector legal y económico se dan cita en la categoría ‘Mirada legal’, un espacio donde nos cuentan su experiencia, perspectivas y los desafíos a los que se enfrentan.
Con todos vosotros, de nuestra serie ‘Mirada legal’, Sonia Salmerón
Sonia Salmerón, periodista en el departamento de comunicación de Lefebvre, asegura que trabajar con profesionales de la abogacía es muy enriquecedor. Valora significativamente el tiempo que estos le brindan cuando, como voces expertas, responden a las dudas que le pueden surgir a la hora de elaborar sus reportajes o noticias, pues asegura que “sus declaraciones son imprescindibles para orientar todos los contenidos”.
Sin embargo, es consciente que los socios y socias de los despachos de abogados no siempre están disponibles y por ello pone de relieve el trabajo de los directores y directoras de comunicación. “La mayoría son periodistas y por eso entienden nuestro trabajo a la perfección”, afirma.
En esta entrevista Sonia nos explica todo de su día a día.
¿Qué te llevó a especializarte en el sector legal?
Después de la universidad y las prácticas en medios me enfoqué exclusivamente en la televisión. Trabajé como jefe de prensa, presentadora de informativos y corresponsal para la Alianza Latinoamericana ECO, proporcionando multitud de noticias y reportajes internacionales con difusión en 18 países de América Latina. Tras esta primera etapa regresé a España y comencé en el sector empresarial. Llevo más de 24 años trabajando en una empresa jurídica. Creo que especializarme en periodismo jurídico era cuestión de tiempo. Siento un gran respeto por todas las áreas, pero el periodismo jurídico me ha enganchado más que ningún otro campo de trabajo. Debo actualizarme constantemente para entender, por ejemplo, las revisiones normativas o cómo es la adopción de la IAG en el sector legal.
¿Qué es lo que más te gusta de tu día a día? ¿Y lo que menos?
Lo que más me gusta es estudiar y actualizar constantemente mis conocimientos. Creo que la asignatura jurídica debería ser obligatoria desde la educación básica en todos los colegios e institutos. Me parece fundamental para multitud de cuestiones personales que realizamos de manera cotidiana y sin ningún criterio. No hay nada de mi trabajo que me guste menos. Quizá me guste poco el no tener más tiempo para poder leer más sobre temas jurídicos.
¿Cuáles son los principales inconvenientes a los que te enfrentas a la hora de informar sobre asuntos legales?
Para mí son inconvenientes las imprecisiones en las fuentes de información. Por falta de tiempo o desconocimiento las búsquedas de información en internet contienen reseñas de conceptos jurídicos mal referenciados. Por eso en mi trabajo utilizo herramientas como GenIA-L, la solución basada en IA generativa que tenemos en Lefebvre y que integra bases de datos jurídicas, mementos y todas las fuentes jurídicas. Es muy intuitiva y fácil de usar, pero también consulto mucho con mis compañeros de redacción. De esta forma sé que puedo manejar fuentes de información fiables. También es frecuente que utilice la información institucional que ofrecen las webs ministeriales o la documentación y guías que aportan los organismos como AEPD, APEP, INCIBE y OEPM. Utilizo todos los contenidos que proporciona el departamento de Comunicación del Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM) o la web oficial de la UE, por ejemplo.
¿Cómo describirías, en líneas generales, tu relación con los abogados?
Trabajar con profesionales de la abogacía es muy enriquecedor. Hace unos años trabajábamos de manera más directa y nunca he tenido problemas a la hora de contar con el asesoramiento profesional de abogados y abogadas. Creo que su aportación es fundamental. Sus declaraciones son imprescindibles para orientar todos los contenidos. Lo mismo ocurre con las entrevistas. Si te detienes en sus respuestas siempre aportan una reflexión nueva o un conocimiento complementario.
¿Qué te gustaría que mejoraran o que cambiaran estos para hacer más fácil tu día a día?
Mi día a día profesional lo hacen más fácil los directores y directoras de comunicación (DIRCOM) de los despachos. La mayoría son periodistas y por eso entienden nuestro trabajo a la perfección. Son facilitadores entre los socios de los despachos y los periodistas. Nos permiten contar con los mejores expertos, quienes dedican mucho tiempo a su trabajo y que sólo son accesibles gracias a los directores de comunicación. Son el enlace idóneo. Son nuestro soporte porque nos proporcionan la seguridad necesaria para darnos la información justa que permite enriquecer los contenidos jurídicos con las aportaciones profesionales de los expertos del área legal.
¿Es realmente diferente el sector legal a otros sectores? Si consideras que sí, ¿qué lo diferencia y cómo impacta esa diferencia en la relación de los abogados con los periodistas?
Creo que la diferencia es que es imposible realizar un contenido jurídico sin las aportaciones de los abogados. No me atrevería a escribir nunca sobre un tema de este sector sin contar con la opinión de los profesionales. Hoy se olvida muy fácilmente lo que nos repetían en la universidad sobre “contrastar las fuentes”. El panorama televisivo actual, con un exceso de información basada en rumores, o las redes sociales difundiendo fake news ponen en entredicho la profesión periodística. Por esto, el periodismo jurídico debería tener más impacto y recorrido. Entiendo que puede ser una forma de contrarrestar con esta rumorología y con el desperdicio de tiempo y dinero que generan las noticias falsas.
¿Cuáles son los temas en los que te cuesta encontrar voces expertas que quieran pronunciarse en tu medio?
El tema que más me ha costado es el acoso en los despachos de abogados. De hecho, no pude escribir sobre este tema porque no encontré portavoces. También, fue difícil conseguir voces para hablar sobre cómo ganar un juicio contra Hacienda. En este caso, el tema salió adelante, se publicó en Expansión y fue uno de los más interesantes. Creo que los bufetes que participaron no se arrepintieron, sino todo lo contrario.
De todas las noticias que has dado, ¿cuál ha sido la más significativa para ti y por qué?
El reportaje ‘Marcas y famosos: los rehenes del robo de dominios en internet’ publicado en Expansión el año pasado. Gracias a este reportaje sobre el robo de dominios en internet recibí el primer premio en la categoría de jurídico en la II edición de los Premios de Periodismo Javier Navarro que convoca la Asociación para la Defensa de la Marca (Andema). Como aparece en el reportaje, los nombres de dominio, los nombres de usuario en redes sociales y los perfiles en sitios web son considerados por los expertos como una propiedad digital «muy valiosa» para los ciberdelincuentes. La propiedad digital debería ser una prioridad para las empresas y personalidades tanto en España como en todo el mundo. Convertirme en una de las primeras periodistas en informar sobre este tema y poner en alerta a la opinión pública sobre los peligros del “typosquatting”y el “cybersquatting” fue muy significativo.
¿Qué no saben los abogados de tu profesión?
Creo que los abogados son conocedores de nuestra profesión. Y como he explicado, son los directores de comunicación los que mejor pueden explicarles si tienen dudas sobre la forma de trabajar y cuál es la diferencia entre una entrevista, artículo o un reportaje.
¿Cuál es tu visión sobre el futuro del periodismo legal?
Lo comentaba anteriormente. El periodismo legal es fundamental. Necesitamos que exista y que tenga un recorrido mayor. No debería desaparecer, sino que debe ampliarse y entiendo que sólo es posible si los periodistas nos podemos especializar en distintas áreas jurídicas. No es lo mismo escribir sobre fiscal, concursal o laboral. Lo normal es que un periodista desconozca los términos jurídicos y la normativa. Por eso es tan importante la formación jurídica y especializarse por áreas.
Un consejo para un colega de profesión
Ante todo, para los que comienzan les aconsejo formación y dedicación. Esta profesión requiere muchas horas de tiempo y es sacrificada. Trabajar en periodismo jurídico implica un 24/7. Si no lo tienen claro, mejor que no comiencen. Esto sería para los periodistas que quieren iniciarse en esta profesión. Para los colegas creo que son ellos los que debieran darme consejos a mí. Admiro mucho a mis compañeros y el ambiente en el sector del periodismo jurídico es de los mejores.
Sonia Salmerón
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